jueves, agosto 31, 2006

Cacheteame

Adiós Glenn Ford, adiós a tu cachetazo en los pómulos plastificados de la Hayworth. Adiós a esa vez que me puse contenta cuando escuché a mi Buenos Aires salir de la boca de aquellos dorados astros hollywoodenses. Con el tiempo, entendí que sólo en una suerte de film noir podíamos ser escenario. Sólo rodeados de personajes bajos, viles, bebedores, perdedores... eternos perdedores. Tan perdida ella, tan perdido él, que el amor era un cachetazo. Buenos Aires. Buenas noches.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hey Mil, can you feel me?
Hey Glenn,la Rita y la copa no se tocan...
Un deseo...acordaos de botánico en vuestros días de verdor.-
Plagiario.-

Milita dijo...

Casualmente ayer pisé el bellísimo botánico, me dió un poco menos de miedo que de costumbre. Tiene algo que me asusta, como el jardín de Ann Bancroft en Grandes Esperanzas. Entré de casualidad, haciendo algo que debí hacer hace mucho tiempo. Viví toda mi infancia visitando el zoo y nunca crucé de vereda. Curioso. No es tan lúgubre de día, con el sol filtrándose entre las lilas, el verde, el polvo de ladrillo. Creo que estoy forzando el efecto primavera. Contagiarme del verdor, como dice ud.